CABEZA PÁ BAJO
Jesús Elorza
Los manifestantes que estaban concentrados en la Plaza O ´Leary se encontraban sorprendidos al escuchar a su Líder Único de la Revolución Mundial diciendo que iba a aprobar la Ley Orgánica del Trabajo por medio de la Ley Habilitante.
No puede ser posible, que ahora el patrono pretenda ocupar el puesto de los sindicatos, expreso en voz alta uno de los asistentes que al parecer siempre era obligado a asistir a este tipo de concentración. Además, continuo diciendo, este gobierno no se merece esa prerrogativa. Los contratos colectivos han estado congelados por mas de cinco años, la deuda de pasivos laborales es gigantesca, las condiciones de trabajo son precarias y la prioridad es la tercerización, han criminalizado las protestas laborales, los dirigentes sindicales son llevados a los tribunales por participar de manifestaciones reivindicativas, la autonomía sindical es inexistente, la violencia contra la dirigencia sindical ha cobrado decena de vidas y los aumentos salariales siempre por debajo de la inflación son mediante decretos gubernamentales sin la participación de los trabajadores. Entonces como explicar que un régimen antiobrero pretenda por si solo elaborar y aprobar una Ley del Trabajo.
Tranquilo camarada, le expreso el miliciano que tenia al lado. Esta hablando como un oligarca. No te olvides que en la Utopia Concreta de nuestra Revolución Socialista, eliminaremos la propiedad privada de los medios de producción, expropiaremos todas las empresas para transformarlas en cooperativas y en un futuro inmediato transferiremos todo el poder a los Consejos Laborales y a las Comunas. Pero en ese transito el control absoluto estará en manos del Estado y el gobierno.
¿Sindicatos para que? si toda la economía estar en manos del Estado, esta claro que las organizaciones gremiales de los obreros no deben existir por que el Estado les dará todo. “En la revolución los sindicatos deben desaparecer” así lo dijo nuestro Comandante en Jefe el día 24 de Marzo de 2007 y así se hará.
Esto me huela a “La Carta del Lavoro” del fascista Mussolini en Italia en la cual los individuos quedaban subordinados al Estado, las elecciones se consideraban una falacia democrática y el pueblo debe prestarle obediencia ciega al líder supremo. Si ese es el camino a seguir, no me cabe la menor duda que va a terminar como El Duce ¡¡¡Colgado en una plaza con la cabeza pá bajo!!!
Mira miliciano de pacotilla, quédate con tú Coma…andante dijeron al unísono un grupo numeroso de los asistentes al mitin. Nosotros nos vamos a seguir luchando por nuestras reivindicaciones laborales en el marco de la Democracia Sindical. Los trabajadores servimos a las dictaduras solo cuando somos sumisos y serviles. Pero cuando reclamamos nuestros derechos nos responden con represión, cárcel o muerte. Solo en Democracia tendremos la posibilidad de alcanzar nuestras aspiraciones a través de las luchas gremiales.
Cuando se estaban retirando retumbaron en los parlantes, las palabras del Líder Único intentando imitar a Jesucristo, al referirse a las madres empobrecidas del país y decir “Dejad que los niños vengan a mí para darles 300 bolívares a cada uno”
Coño, Mussolini se quedo en pañales frente a este loco populista y bonapartista, dijo uno de los manifestantes al momento de romper la bandera y la gorra roja que le habían dado.
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