TOQUE DE QUEDA
Jesús Elorza
El Gobernador de Aragua Rafael Isea contando una anécdota de su infancia en una rueda de prensa, propuso “inocentemente” declarar un Toque de Queda en el Estado, para contrarrestar el alto índice de inseguridad. Quizás el fracaso de todos los planes de seguridad por él implementados, lo llevo a explorar la posibilidad de poner en práctica una medida por demás, violatoria de los Derechos Humanos.
Las reacciones de protesta ante la “candida” medida anunciada, no se hicieron esperar. A todos los niveles, los ciudadanos señalaban que el gobierno regional ha sido incapaz de resolver el agravante problema de la inseguridad. Pura pantalla con operativos mediáticos es lo que se le ha visto. Pero día a día, vemos en los medios de comunicación como la violencia cobra sus victimas. Los cuerpos policiales han sido sobrepasados por los malandros y asesinos.
El comentario generalizado es que en la región se vive desde hace mucho tiempo un Estado de Excepción. Para nadie es un secreto que el Gobernador Isea mantiene a la totalidad de la región aragueña en un abusivo, ilegal y permanente toque de queda.
QUEDA sin luz la comunidad, por los constantes apagones generados por la incapacidad gerencial de Corpoelec.
QUEDA establecido un racionamiento eléctrico acompañado de la amenaza injustificada de multas por consumo de energía.
QUEDA inundada la zona de Mata Redonda y La Punta por la negligencia de atender la problemática del Lago de los Tacariguas.
QUEDA el incumplimiento de la decisión judicial del TSJ que obliga las indemnizaciones de los habitantes de los sectores inundados.
QUEDA en evidencia el fracaso de las políticas y programas del sector salud. Hospitales deteriorados y sin recursos. Médicos, enfermeras, personal administrativo y obrero mal remunerados y con sus contratos laborales congelados.
QUEDA la población en manos del hampa por el permanente fracaso de las medidas de seguridad “implementadas” por el gobierno.
QUEDA un sector industrial desmantelado. Fabricas expropiadas. Complejos industriales abandonados. No hay inversión en el sector.
QUEDA una población empobrecida y sin fuentes de empleo. Crece de manera desmedida la economía informal.
QUEDA un río de personas haciendo colas desde hace muchos años en la Misión Vivienda para ver si logran conseguirse un techo. Proliferan las OCV y las invasiones; pero, no se ven las soluciones habitacionales prometidas.
QUEDA una fuerza de orden publico sin seguro HCM y ruleteando por los centros de asistencia medica cuando algún funcionario es herido.
QUEDA un sector universitario cercado presupuestariamente y violentado en su autonomía.
QUEDA la orden de la Autoridad Única de Educación de no contratar como docentes a los egresados de la Universidad Pedagógica Libertador.
QUEDA la congelación de todos los contratos colectivos.
En síntesis, el toque de Isea es una realidad desde el primer día de su mandato. Solo QUEDA al pueblo aragüeño unificar solidariamente su fuerza de lucha democrática para superar este ineficiente y nepotico régimen militarista.
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