Operación “Vuelan las
palomas”
Jesús Elorza
Muy emocionada, andaba
Mary Kory, no paraba de cantar el coro de una de las famosas canciones de Tito
Rodríguez que decía así: “Vuelan las palomas en su palomar / y vuelan que
vuelan para no tornar”.
Todos en la calle, le
preguntaban sobre las razones de su manifiesta alegría. Y ella, dejaba de
cantar y con voz firme y segura comenzaba a explicar que, desde hace más de un
año, cinco de sus apreciadas aves, fueron injustamente acusadas de ser palomas
mensajeras que transportaban informaciones de las actas electorales de la
última elección presidencial a los grupos opositores. A raíz, de esa falsa acusación,
continuaba diciendo Mary Kory, no les quedó otra alternativa, a las aves que
buscar un refugio seguro para escapar de sus perseguidores.
Sobrevolando por todas
las urbanizaciones de Caracas, lograron ver una casa que contaba con un amplio
patio rodeado de muchos árboles que le podían servir de refugio. Además, en
dicha residencia vivían una pareja de argentinos miembros del cuerpo
diplomático que a su vez eran miembros de la Sociedad Protectora de Animales de
su país. Todo iba de maravilla, pero los
perseguidores no cesaban con sus amenazas y pretendieron allanar la residencia
escudándose en que, Venezuela rompió las relaciones diplomáticas con Argentina.
Sin embargo, Brasil asumió la representación consular argentina impidiendo así
el programado allanamiento.
Más de cuatrocientos
días, permaneció el cerco policial y represivo sobre la residencia donde se
encontraban mis apreciadas aves acusadas de terroristas. Todos los servicios
fueron suprimidos: Agua, luz, gas y no permitían el ingreso de alimentos
señalaba muy molesta Mary. Gracias, a la Cruz Roja, logramos que entraran
bolsas de alpiste y otros insumos.
Al serles negados los
salvoconductos solicitados por Brasil, no me quedó otra alternativa de buscar
la solidaridad internacional para poder rescatarlas. Entre en contacto con las
Sociedades Protectoras de Animales de: los Estados Unidos, la Unión Europea, la
OEA, ONU, Corte Penal Internacional y Amnistía Internacional quienes me
brindaron todo su apoyo y solidaridad.
Al ver que, con el paso
del tiempo no se lograba una solución que permitiese la salida de los rehenes,
no me quedó otra alternativa que buscar otros caminos para lograr rescatar a
las aves retenidas continúo explicando Mary Kory. Luego, de un análisis
pormenorizado de todos los elementos relacionados con la residencia, logramos
detectar que “los Guachimanes” custodios del recinto tenían como sus mascotas a
loros, periquitos, canarios, turpial, gallos etc. lo que abría, una posibilidad
de poder entrar y sacar a los rehenes. Una vez coordinados todos los elementos,
tomamos la decisión de ponerle el nombre de “Operación Guacamaya” a la acción
de extracción. El nombre escogido, fue porque, el colorido del plumaje de esa
ave representa los colores de la Bandera Nacional.
En uno de los primeros días del mes de mayo,
los guachimanes de la residencia al ver llegar una comisión que traía alimentos
e insumos para los rehenes en amplios bultos, los dejaron pasar y fueron
recompensados con bolsitas de alimentos para sus aves mascotas. La extracción o
rescate de los rehenes se realizó sin ningún inconveniente.
Todos los que escuchaban
a Mary Kory, no dudaron ni un instante en manifestar su apoyo y alegría por la
libertad de los rehenes y de inmediato se incorporaron al coro y comenzaron a
cantar:
…..Vuelan las palomas /
en su palomar
Y vuelan que vuelan / para no tornar.
El mismo día, de la
extracción, las aves emprendieron su vuelo hacia la libertad y como dice el
refrán popular, a los perseguidores le pintaron una paloma.