VIA CRUCIS DE LOS MAESTROS
Jesús Elorza
Frente a las agresiones
que a diario sufre el sector educativo por parte del régimen, los obreros, empleados,
estudiantes y maestros decidieron darle un contenido social de protesta
pacífica y democrática a los actos de la conmemoración anual cristiana de la
Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret.
En tal sentido, sin el
ánimo de ofender la tradición cristina, queremos recordar que, el
Vía Crucis (en latín: «camino de la cruz») es una de las devociones o
prácticas de oración más extendidas entre los cristianos y refiere las
diferentes etapas o momentos vividos por Jesús desde el momento en que fue
aprehendido hasta su crucifixión y sepultura.
También, la expresión se
usa comúnmente para expresar todo tipo de dificultades que se presentan en la
vida. Basados en este último principio, los maestros hicieron un ejercicio de
sincretismo, mezclando las etapas recorridas por Jesús en su vía crucis,
con las penurias y dificultades por las cuales atraviesa la Universidad en
Venezuela.
Ese vía crucis que,
durante 26 años (1999-2025), han sufrido los educadores, se han expresado de
distintas maneras en cada una de las 15 estaciones que conforman el calvario y
sufrimiento en su camino a la crucifixión:
Estación I. Salarios Extremadamente Bajos:
Los sueldos de los docentes son insuficientes para cubrir la canasta básica
alimentaria, lo que los coloca en una situación de vulnerabilidad económica
extrema.
Estación II. Pérdida Drástica del
Poder Adquisitivo: La hiperinflación y la devaluación
constante han pulverizado el valor real de sus ingresos.
Estación III. Deterioro de la
Infraestructura Escolar: Muchas escuelas carecen de
mantenimiento básico, con problemas en techos, baños, pupitres, y salones en
mal estado.
Estación IV. Carencia de Servicios
Básicos en las Escuelas: Frecuentes cortes de electricidad,
falta de agua potable y problemas con el saneamiento básico son comunes en los
planteles.
Estación V. Escasez de Materiales Didácticos y Recursos Pedagógicos:
Falta de libros de texto actualizados, pizarras, marcadores, material de
laboratorio, computadoras y otros recursos esenciales para la enseñanza.
Estación VI. Falta de Acceso a Tecnología
y Conectividad: Limitado o nulo acceso a internet y
equipos tecnológicos en las escuelas (y a menudo en sus hogares), dificultando
la actualización y la implementación de nuevas metodologías.
Estación VII. Problemas con el Transporte
Público: El deterioro del transporte público y el alto costo
de los pasajes (en relación a sus salarios) dificultan o impiden que muchos
maestros lleguen a sus lugares de trabajo.
Estación VIII. Inseguridad Personal y en
los Planteles: Riesgos de robos y violencia tanto en el
trayecto hacia las escuelas como dentro de las mismas, debido a la falta de
vigilancia adecuada.
Estación IX. Deterioro de los Beneficios
Contractuales y Seguridad Social: Pólizas de seguro médico
(HCM) con coberturas insuficientes o inexistentes, problemas con las cajas de
ahorro, jubilaciones y pensiones que no alcanzan para vivir.
Estación X. Éxodo Masivo de Docentes
(Fuga de Cerebros): Muchos maestros calificados han emigrado
del país o han abandonado la profesión buscando trabajos mejor remunerados,
dejando vacantes y sobrecargando a los que quedan.
Estación XI. Falta de Programas de
Formación y Actualización Profesional: Escasas oportunidades
para el desarrollo profesional continuo, actualización pedagógica o estudios de
postgrado, a menudo por falta de oferta o por ser inaccesibles económicamente.
Estación XII. Sobrecarga Laboral:
Debido a la falta de personal, los maestros a menudo deben atender grupos más
numerosos o asumir responsabilidades adicionales sin compensación.
Estación XIII. Altos Niveles de Estrés,
Ansiedad y Desmotivación: La combinación de bajos salarios,
malas condiciones laborales, falta de recursos y la crisis generalizada generan
un gran desgaste físico y emocional.
Estación XIV. Dificultad para Cubrir sus
Propias Necesidades Básicas: Muchos maestros luchan
diariamente para conseguir alimentos, medicinas y otros bienes esenciales para
ellos y sus familias.
Estación XV. Impacto de la Crisis en los
Estudiantes: Lidiar con alumnos que sufren
desnutrición, problemas familiares, estrés por la crisis, o que abandonan la
escuela, añade una carga emocional y pedagógica adicional al trabajo del
docente.
La Resurrección de la
escuela y el maestro, pasa inexorablemente por la Unidad de todos los sectores
sociales del país en la búsqueda del respeto a la soberanía popular y a los
derechos consagrados en la Constitución Nacional.
El mensaje de la liturgia
para el sector educativo y para todo el país no puede ser más claro y
contundente: “Solo la unión de los feligreses en perfecta comunión podrá
enfrentar a los desmanes del régimen corrupto…el silencio de los que sufren
solo los hace cómplices de aquellos solo buscan establecer el pensamiento único
como norma de comportamiento ciudadano mientras que, ellos, medran y se
apropian ilegalmente de los dineros públicos…¡¡¡Despertad, despertad…no dejen
que sigan abusando de ti!!!” Solo así podrá resurgir la Libertad y la
Democracia.