martes, 19 de noviembre de 2024

 









ADEFESIO JURIDICO

Jesús Elorza

Tratando de definir la sentencia por la cual se suspende del ejercicio profesional a la abogada María Alejandra Díaz Marín, emitida por la Sala Constitucional del TSJ, no hay término más adecuado que el de adefesio.

Un adefesio jurídico es un proyecto o acción que se considera anormalmente disparatado, malformado o que se sale de sus propósitos de manera monstruosa. La palabra adefesio se asocia con algo ridículo, feo o disparatado. En el Diccionario de la Real Academia Española, adefesio se define como disparate, adorno ridículo o persona muy fea.

Y esa decisión contra la abogada Díaz Marín, por haber actuado, como asistente de un grupo de ciudadanos, en recurso de amparo contra el CNE, exigiendo la presentación de las actas electorales del 28 de julio, no es más que eso: un adefesio, o, mejor aún, un disparate. Un disparate jurídico porque no hay norma que la sustente.

El amparo constitucional solicitado por Díaz al máximo tribunal del país para pedirle que ordene al Consejo Nacional Electoral (CNE) mostrar las actas de votación y los resultados desagregados regionales de los comicios presidenciales del pasado 28 de julio, no sólo recibió un “no”: también ha sido multada y ahora tiene prohibido ejercer temporalmente su profesión.

Pero también es una barbaridad política porque sancionar al abogado que representa una pretensión de ciudadanos hábiles y en ejercicio de sus derechos constitucionales es violatorio de la carta magna (art. 26 y 49), que proclama el acceso a la justicia, a la tutela efectiva de los derechos individuales y de los colectivos, a tener defensa y asistencia jurídica en todo estado y grado del proceso.

Hay que recordar que la decisión de la Sala Constitucional, que también viola tratados y acuerdos internacionales sobre derechos humanos que consagran como derecho fundamental la asistencia jurídica, va dirigida personalmente contra la abogada María Alejandra Díaz Marín, una conocida dirigente chavista que abandonó esas filas y no ha vacilado en expresar públicamente sus críticas a la gestión madurista. Calificaron su proceder de “temerario” y por ello la suspensión, lo que crea un grave precedente y envía un claro mensaje de retaliación contra cualquiera que se atreva a enfrentarlos jurídicamente. El término temerario no es definido por la Sala Constitucional, lo que lo convierte en una calificación autoritaria. El Supremo también ordenó al Tribunal Disciplinario del Colegio de Abogados de Venezuela que, “de manera perentoria”, comience un procedimiento disciplinario contra Díaz, con el fin de aplicar “la sanción que corresponda de acuerdo a la gravedad de los presentes hechos” Además, la abogada fue multada “en cien veces el tipo de cambio oficial de la moneda de mayor valor establecido por el Banco Central de Venezuela’'. El Tribunal advirtió a Díaz que, si no paga a tiempo, “tal sanción podrá incrementarse entre un tercio y la mitad del total de la multa”.

Un ejercicio arbitrario de la justicia –que cierra cualquier vía constitucional de reclamo– lanza una advertencia de sanción a los abogados que intenten acciones o recursos contrarios a los intereses de quienes detentan el poder. Una acción propia del nazismo. Se trata de que la abogada Marín ahora está en una situación de pérdida de sus derechos civiles.

Esta decisión muestra que quienes detentan el poder están dispuestos a ejercer la represión en todos los niveles. Ya no es la represión contra las protestas de calle que ha arrojado cientos de encarcelados y torturados, incluidos menores de edad y personas con discapacidad, a quienes han violado sus derechos humanos y garantías procesales; tampoco la represión selectiva, dirigida contra los periodistas y políticos opositores. Ahora cierran la vía judicial de la protesta. La finalidad es acallar el rechazo y adormecer la esperanza de cambio.


sábado, 2 de noviembre de 2024

 








CIRCO SIN PAN

Jesús Elorza

Al escuchar las palabras del recién nombrado ministro del deporte y presidente del IND, en donde anunciaba pomposamente la celebración de los Juegos Deportivos Nacionales del 8 al 24 de noviembre en seis subsedes (Anzoátegui, Sucre, Monagas, Carabobo, Guárico y Falcón) con ¡¡¡57 disciplinas deportivas!!! con la participación de 7.176 atletas y cerrar su discurso con el calificativo de “estos juegos serán los más perfectos de la historia deportiva del país”. Los atletas, entrenadores y dirigentes deportivos a lo largo y ancho del territorio nacional no salían de su asombro frente a esos anuncios ministeriales.

-Un atleta, comentaba que esos anuncios no pasan de ser palabras vacías o anuncios populistas para tratar de tapar la crisis que se han generado en el sector deportivo las autoridades en los últimos 25 años. (Ministerio del Deporte, IND y COV) que pretenden tapar sus errores, falta de programas y su desconocimiento de la materia deportiva solo con consignas demagógicas o populistas tales como: “Generación de Oro”, “Somos Potencia Deportiva” o “Venezuela se arregló” y ahora con el anuncio de “los mejores juegos de la historia” Es el caso típico de los ineptos en el poder. 

-Otro atleta, intervino para expresar que ahora vienen con su cara muy lavada a anunciarnos que van a comenzar a pagar las pírricas becas que las habían suspendido desde hace mucho y no debe sorprendernos que una vez finalizado el espectáculo de los juegos las vuelvan a suspender. El cierre de los comedores y la falta de seguros HCM hace mas inestable nuestra preparación como atletas.

-Un dirigente señaló que, desde hace muchos años venimos trabajando sin que le hayan aprobado a las asociaciones deportivas los recursos presupuestarios para el desarrollo de los programas operativos anuales (POA) y ahora salen con el discurso de la asistencia masiva a los juegos. Me pregunto, ¿qué pasó con los topes preparatorios o con los clasificatorios? Además, es pertinente preguntar ¿cuantos estados están en capacidad de participar en unos juegos con ¡¡¡57 disciplinas deportivas? ….no creo que sean muchos.

-Un colega dirigente, intervino para apoyar lo expresado por su compañero y agregó que el deterioro de nuestras instalaciones deportivas deja a nuestros atletas sin lugares acondicionados para sus entrenamientos. Ahora vemos, como andan apuradas las autoridades dándole un ligero maquillaje a las instalaciones para justificar. Pero, debemos señalar, responsablemente que el mantenimiento de las instalaciones debe ser permanente en el tiempo y esporádicamente para cuando se necesita disfrazar un espectáculo.

-En el caso de los entrenadores, se hace evidente la inseguridad laboral con salarios de hambre, la apropiación indebida de los aportes a su Caja de Ahorro y el no reconocimiento de sus derechos contractuales. La no homologación y pago de los pasivos laborales de los pensionados y jubilados del Instituto Nacional de Deporte. La asignación de viáticos discrecionalmente y siempre por debajo de las tablas oficiales.

A todo esto, hay que agregar la falta de planificación de las ineptas autoridades deportivas al programar unos juegos casi en la misma fecha de los juegos bolivarianos 2024 que se celebraran del 28 de noviembre al 8 de diciembre. Que pasa, cabría preguntarse, con los topes de rendimiento de los atletas, es conveniente salir de una competencia directo para el aeropuerto para viajar a otro país a competir, que pasa con la fase del descanso activo, o es, como tenemos que suponer que las autoridades no tenían conocimiento de los juegos bolivarianos.

Finalmente, toca señalar que al finalizar los juegos deportivos nacionales el 24 de noviembre, una semana después, el día primero de diciembre se inauguran los Juegos Paranacionales en ¡¡¡24 disciplinas deportivas!!!. Sin embargo, cabe señalar que el deporte paralímpico en el país no está exento de la crisis que afecta al sector: Insuficientes instalaciones deportivas, escasez de material deportivo, ausencia de programas de protección integral para los atletas, insuficiencias presupuestarias para el sector federativo, ausencia de juegos nacionales paralímpicos, extremas limitaciones presupuestarias para el desarrollo de campeonatos nacionales por especialidades,  limitados aportes para las becas a los atletas, sin presupuesto en las entidades regionales para asistir a los eventos o atender la preparación de los atletas y su asistencia a los campeonatos. salarios de hambre para los entrenadores, asignación de viáticos por debajo de las tablas establecidas, ausencia de comedores y de transportación para los atletas. 

Las autoridades deportivas quedan al descubierto con su política similar a la de los emperadores romanos de “Pan y circo” pero que, en este caso se limitaron nada más al circo. Superar esta tormenta perfecta de populismo demagógico, requiere un cambio de gobierno, planes y programas para restituir integralmente los Juegos Nacionales, un programa de Asistencia Social para los atletas y entrenadores, acabar el flagelo de la corrupción, fortalecer la autonomía del sector deportivo federado, recuperar nuestras instalaciones deportivas, una ley de deporte que limite la dualidad de cargos en las organizaciones, que elimine la reelección indefinida, que prohíba la elección de funcionarios públicos de libre nombramiento y remoción en la dirigencia deportiva, un acuerdo con el sector universitario para la formación de entrenadores, el manejo transparente del Fondo Nacional del Deporte, la descentralización del programa Deporte para Todos y un presupuesto acorde con las necesidades del sector.