Bono vacacional en clave de Fa
Jesús Elorza
En todos los niveles y
modalidades del sistema educativo del país, el tema de conversación entre los
obreros, empleados y docentes está relacionado con el pago de sus
bonificaciones contractuales para el disfrute de sus vacaciones. Todos sin
excepción, recuerdan el desagradable momento que vivieron cuando el régimen de
Nicolás Maduro ordenó el año pasado en forma burlista que, el pago se hiciera
en “clave de FA” lo que significaba “Fraccionado y Aplanado” y así se hizo, lo
que desencadenó múltiples protestas a nivel nacional.
Para su irresponsable
decisión el régimen puso en práctica una normativa especial que la bautizó como
el “Proceso de Ajuste del Sistema de Remuneración de la Administración Pública,
Convenciones Colectivas, Tablas Especiales y Empresas Estratégicas”.
Esta norma creada en
marzo pasado por la Oficina Nacional de Presupuesto (ONAPRE), adscrita al
Ministerio de Economía, Finanzas y Comercio Exterior, especifica criterios para
aplicar el incremento salarial decretado por el presidente Nicolás Maduro en el
primer trimestre de 2022.desaplicando los contratos colectivos vigentes y
estableciendo unilateralmente un tabulador de beneficios que reduce el salario
integral de los trabajadores entre 40 y 70% violenta al menos media docena de
disposiciones constitucionales.
Los sindicatos y gremios
de educación denuncian que el instructivo viola acuerdos de las convenciones
colectivas vigentes y disminuye los montos de las bonificaciones. Por ejemplo,
no toma en cuenta la antigüedad del personal, recortó las primas, contravino
los acuerdos de las convenciones colectivas en materias como bonos para
uniformes y días festivos, modificó el criterio de las “interescalas”
salariales, ignorando los distintos porcentajes de cálculos para salarios según
el tipo de personal, grado y nivel, modificó unilateralmente la manera de
calcular los beneficios, como las bonificaciones por antigüedad y las primas de
especialización o profesionalización, por uniformes y por hijos, los docentes
ya no recibirán un pago equivalente al 30% de su salario por tener una
licenciatura, sino de 25%; quienes tenían maestrías ya no ganarán una
asignación mensual equivalente a 50% de su sueldo, sino de 35%; y aquellos con
doctorados pasaron de percibir 60% de bonificación a 40%.
Para cuidar sus espaldas
y mantener las ilegales normativas el régimen procedió a tomar sus decisiones
en reuniones solo con organizaciones afectas creadas bajo el concepto de
paralelismo sindical y dejo por fuera a grupos gremiales legitimados para
participar, representar y defender los derechos e intereses al menos de los
profesores universitarios. Por ejemplo, a la Federación de Asociaciones de
Profesores Universitarios de Venezuela (FAPUV) no se le permitió participar en
esos espacios de discusiones y decisiones colectivas.
A un año y tres meses de
esa arbitraria e ilegal imposición de una normativa por parte del régimen a
través de la ONAPRE, los trabajadores del sector educativo nuevamente sufrirán
en carne propia la reducción de sus beneficios laborales. Toca en el mes de
julio de sta año 2023 el pago del bono vacacional que, al mantenerse congeladas
las tablas salariales el cálculo de los montos del bono será similar al del año
2022. Pero de mantener el mismo pago se va a producir una pérdida económica
superior al 85% con relación al año pasado. En aquel momento del 2022, el dólar
tenía una cotización de 4,38 bolívares por unidad y ahora el dólar está en
aproximadamente 30 bolívares por unidad lo que representa un incremento del 93%
en el valor del dólar y un detrimento del valor del bolívar. Un ejemplo
concreto, puede ayudar a la comprensión de los problemas que giran alrededor del
bono vacacional: Un profesor titular que recibió (Fraccionado y Aplanado) en el
2022 aproximadamente 3.500 bolívares con un dólar cotizado en ese momento en
4.38 estaba recibiendo aproximadamente 800 dólares de bono vacacional. Ahora en
el 2023, con la congelación de los contratos colectivos y la aplicación de la
normativa ONAPRE va a recibir el mismo monto de 3.500 bolívares, pero ¡¡¡con un
dólar a 30!!!lo que se traduce en que solo va a recibir 116 dólares de bono
vacacional lo que representa una drástica reducción de sus beneficios en más
del 85%.
Este hecho, arbitrario e
ilegal, vulnera disposiciones constitucionales como el derecho al trabajo, el
principio de progresividad de los derechos humanos, la reserva legal, la
suficiencia del salario y la libertad sindical, entre otros. Asimismo, la
naturaleza del acto es de dudosa legalidad, pues la resolución de la Onapre es
un acto administrativo dictado por un organismo que tiene
como competencia elaborar el presupuesto nacional y ayudar a la
Oficina Nacional del Tesoro a ejecutarlo, de acuerdo con la Ley Orgánica de la
Administración Financiera del Sector Público. La Onapre no está facultada en
ningún caso para decidir temas como las remuneraciones del personal de la
administración pública; eso es potestad de los departamentos de personal y
recursos humanos de los distintos organismos.
Además,
el momento requiere una posición clara y determinante de los directores de
escuelas y liceos, de los rectores rectores y consejos universitarios y de las
organizaciones gremiales estudiantiles, obreros, empleados y docentes en la
denuncia y reclamo de este nuevo robo de los derechos laborales de los
trabajadores. Pudiéramos comenzar, solicitando que en la elaboración de las
nóminas se incorpore en los cálculos de la Bonificación Vacacional 2023 la
incidencia del Bono de Guerra Económica. El Bono de Alimentación (Cesta Ticket)
o Bono de la Salud en el caso del personal jubilado y pensionado. Y continuar
nuestra protesta en las calles del país hasta lograr un cambio de gobierno que
se desempeñe en el marco de la Constitución y las Leyes y el respeto a los
Derechos Laborales de los Trabajadores.